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martes, 31 de agosto de 2010

Nombre_Qhuinn
Apellido
color de cabello: Negro
color de ojos:verdey azul
se alimenta ...:sangre de su raza

Es el mejor amigo de Blaylock y Jonh Mattew. Es odiado por su familia a causa de sus ojos dispares, un defecto visible y visto mal dentro de la aristocracia vampira, la Glymera. Durante la formación, para llegar a ser un guerrero que protege a su raza, estuvo a punto de matar a su primo Lash, para defender a Jonh cuando éste lo atacaba haciéndole recordar la violación sufrida antes de ser un vampiro. Con el fin de evitar ser condenado a muerte, el Rey decidió que sería el Ahstrux nohtrum de John Mattew, es decir, su guardia privado con licencia para matar a cualquiera que arriesgue la vida de John. Él, John y Blay trabajan muy bien en equipo. Actualmente, el vive en la mansión de la hermandad, con John, Blay y los hermanos después de que su familia renegara de él. Ha demostrado ser un guerrero feroz en la guerra contra el Restrictores, ser un fiel y leal amigo y un seductor con las hembras, prefiriendo un flujo constante de sexo anónimo a una pareja.

Qhuinn sacó una chaqueta ligera de su bolso y pareció recomponerse mientras se la ponía. Cuando se dio la vuelta, su característica sonrisa de listillo estaba de vuelta en su lugar.
—Tus deseos son órdenes, mi príncipe.
No me llames así.
Mientras se dirigía a la salida, John envió un mensaje de texto a Blay, esperando que finalmente apareciera. ¿Tal vez cedería si se le chinchaba lo suficiente?
—¿Entonces cómo debo llamarte? —dijo Qhuinn mientras se le adelantaba de un salto para abrir la puerta con una floritura—. ¿Prefieres «mi soberano»?
Dame un respiro, ¿quieres?
—¿Qué tal el viejo y querido «Amo»? —Cuando John simplemente le fulminó con una mirada por encima del hombro, Qhuinn se encogió de hombros—. Está bien, seguiré con cabezón entonces. Pero es cosa tuya, yo te he dado opciones.

Capítulo 30 - Amante Consagrado

En rápida sucesión, Qhuinn sopesó sus respuestas: No, por supuesto que no, el cuchillo actuó por voluntad propia, en realidad yo estaba intentando detenerlo… No, sólo pretendía afeitarlo... No, no me percaté que cortarle la yugular a alguien podría conducirle a la muerte...
Capítulo 28 - Amante Consagrado

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